La imagen de Jorge Campos con ella en el Mundial del 94 es tan mítica que es para tenerle cariño. No obstante, hay que reconocer que es, como mínimo, llamativa. En cambio esta vez la fortuna se alió con el Valencia, un espléndido Diego Alves evitó varios goles del vendaval azulgrana, y antes del descanso el equipo logró marcar dos goles: uno de Rakitić en propia portería tras desviar un centro de Siqueira y otro de un enchufadísimo Santi Mina tras una grandísima jugada colectiva entre Enzo, André y Parejo.