En julio de 1951 se iniciaron las obras de ampliación de Sarriá, y el estadio, que pertenecía a la familia de La Riva, pasó a ser propiedad del R. C. D. Español que presidía Francisco Javier Sáenz. Deciden apostar por una Ampliación de Capital que estaba resultando ruinosa al haber sido planeada a la medida del empresario Víctor Gálvez, nueva camiseta real madrid y que se ve impulsada ante la aportación de 200.000 Euros por parte del Notario Francisco Tornel.